aproximadamente a 101 kilómetros de la capital, en el departamento de Santa Rosa, rodeada de verdes montañas descansan las tranquilas aguas de La Laguna de Ayarza. Este es un recurso natural donde aún no ha llegado la contaminación.Constituye una fuente de ingresos para los aldeanos de los alrededores por sus abundantes peces, cangrejos y caracoles.